Virgo con Tauro

Virgo y Tauro son de tierra y esto ya basta para lograr una buena unión. Podrán ser excelentes socios, pues precisamente su elemento ligante es el trabajo. Estables, moderados e igualmente ambiciosos, se embarcan en proyectos concretos. Tauro aportará seguridad y solidez, y Virgo perfeccionará lo logrado. Si la mujer es la de Tauro, deberá apelar a su buen humor para calmar el mal genio de un hombre abrumado por sus preocupaciones.
Ella podrá, sólo con una sonrisa, ser el bálsamo que lo alivia de las tensiones de su trabajo. Si la taurina no lo logra, él se encerrará en su pequeño mundo sin dejarla entrar ni siquiera para alcanzarle un té con limón.
La premisa de ambos es el espíritu práctico. Saben interiormente que la sensualidad llegará de un modo muy natural. Si ella es de Virgo, él se sentirá muy reconfortado por saber lo mucho que disfruta la virgen de su compañía. Sabe de sobra que en él encuentra contención y seguridad, y con eso le basta. Toros… ¡sentados!

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