La de Virgo con Leo es una relación bastante armoniosa y, aunque son diferentes, se pueden complementar.
Uno es intelectual, el otro, sentimental.
Casados, la relación no será diferente: el león será el centro de atención y ella, la encargada de mantener el orden en el escenario, antes y después del acto, cualquier acto… salvo que ella sea la de Leo.
Será, entonces, la reina, a partir de ese instante.
Querido Virgo, sigue así con tu humilde manera de dirigirte a ella, con toda cordialidad y, sobre todo, con sumisión.
Si eres un Virgo de verdad, podrás poner a prueba este amor todas las veces que quieras. Pero… si la relación con tu reina te rompe los esquemas es porque no has hecho tu carta natal a tiempo.