Carácter y fisonomía de Piscis

Los Piscis tienden a proteger a los seres indefensos. Respetan la Naturaleza, aman profundamente a los animales y a los niños. Una vez una pisciana fue a ver un espectáculo de ballet al Teatro Colón. Al terminar la función reflexionó: «El espectáculo me gustó, pero en vez de hacer danzar a las bailarinas en puntas de pie, sería más humano que contrataran bailarinas más altas, ¿no?» Quizás por esto los Piscis sean incomprendidos por los geminianos, que se aprovechan de ellos. Piscis pone en práctica su lema característico: amor y misericordia. Su irresistible vocación por las tareas humanitarias lo lleva a elegir profesiones que satisfagan lo que él llama una misión.
También su sensibilidad lo acerca a las realizaciones artísticas, tan emparentadas con lo espiritual. En ambas tareas, necesita de la soledad para poder desarrollar su rica vida interior. Piscis se siente incomprendido por la mayoría de las personas que lo rodean, pues no le interesa ganar dinero. Sin ser solitario, cuando debe trabajar para sustentarse económicamente, le cuesta enormemente tener que cobrar. Se las arregla para tener a alguien cerca que lo reemplace en esa tarea tan estresante.
A veces, hacen prevalecer los sentimientos ante los hechos reales; absorben los problemas ajenos y hasta pueden dejarse caer en los espejismos de la droga y el alcohol. El pisciano tiene baja capacidad para absorber la realidad, entonces busca su compensación en la quimera. Sus pensamientos tienden a confundirse; mezclan todo y culpan a los demás de sus propios errores. Cuando un pez se queja, es porque el edificio que se acaba de derrumbar no lo deja respirar.
Su fe inquebrantable hará que espere pacientemente el rescate. Su táctica es no ofrecer resistencia Cuando se encuentra acorralado por la mirada inquisidora de alguien, hace como la anguila, se escapa hábilmente entre las manos.
El pez nació para expresar su fantasía hacia el mundo exterior, por eso es que quizás permanece indiferente frente a lo que acontece en la vida mundana, no por carencia de sentimientos sino por exceso de ellos. Es el emotivo por excelencia y su sensibilidad requiere ambientes que lo favorezcan. Prefiere el mar a la montaña y su acercamiento es tan contemplativo como activo. Ama los paisajes bellos y tranquilos donde pueda sumergirse en sus emociones. La pesca es su deporte favorito y todo lo que se relacione con el agua le atrae, pero es posible que también le atraigan los paisajes desérticos.
Le gusta el silencio y la meditación. En las reuniones sociales se siente perdido. Como debe desandar los tortuosos recovecos de su cerebro, busca el aislamiento hasta en su propia casa; una torre, una bohardilla, una cueva donde poner en práctica su meditación. Piscis siempre vive escondido.
No se le ocurre buscar el aplauso del público.
Su vida aparece como un misterio. Nunca se sabe a dónde va, de dónde viene, cómo gana su dinero ni cómo lo gasta. Alguien dijo que los piscianos son una esponja cósmica. Son los detectores de mentiras pero no como una simple máquina. Su intuición es quizás tan refinada como la de los acuarianos El olfato pisciano está a flor de piel. Si los jueces, o los trabajadores de la justicia, fueran Piscis sabrían a ciencia cierta si el procesado es culpable o no Todos tenemos esa capacidad de ver con los ojos del alma, sólo que los Piscis la tienen ya desarrollada desde que nacen.

Signo Piscis