Cuando una persona nacida el 6 de junio entra en un lugar, se produce un sentimiento de efervescencia y expectación colectivo. Son personas que saben provocar las cosas, algo que los demás detectan instintivamente. No tienen dificultad para comunicar sus ideales progresistas y trabajarán denodadamente para hacerlos realidad. Esto les granjeará muchos admiradores, que elogiarán su alto grado de compromiso con el bienestar de la gente.
Aunque son agitadores por naturaleza, también pueden llevar su visión o sus ideales a posiciones extremistas. Esto puede traducirse en un comportamiento inusual o incluso peligroso. La gente más convencional puede pensar que su lado más salvaje se expresa en la forma de hobbies arriesgados, relaciones extravagantes o fantasías tan extrañas como fabulosas. Algunas veces sus sueños y sus ideales son tan ambiciosos y tienen tan largo alcance que parecen opacos a ojos de los demás. Esto puede incomodarles profundamente dado que han nacido y viven sólo para compartir, inspirar y cambiar las cosas. Aprender a expresarse de manera más clara y sencilla les ayudará a hacerse entender.
Aunque nunca deberían ejercer un control excesivo sobre su maravillosa energía, sí deberían encontrar una suerte’de equilibrio para que sus tendencias más bizarras no les alejen ni les aislen de los demás. Afortunadamente, entre los quince y los cuarenta y cinco años de edad es probable que se contengan y sean más conscientes de su seguridad, prestando una especial atención a la familia, el hogar y la vida personal. Sin embargo, cuando cumplan los cuarenta y seis años sentirán una mayor necesidad de liderazgo y de expresar los que piensan y lo que sienten. Durante este periodo es probable que devengan más asertivos y tengan más confianza en sus capacidades, cosa que les animará a asumir responsabilidades en la esfera pública. En este tiempo es importante que entiendan que sus actos sirven como modelo de conducta para mucha gente, y que una actitud vital más equilibrada facilitará la relación con su entorno.
Una vez que hayan encontrado su público, gente con la que puedan relacionarse bilateral y satisfactoriamente, estarán a la altura de la expectación que su visión progresista de la realidad genera. El alivio que sentirán al comprobar que la gente ha entendido su mensaje les animará a expresar su naturaleza dedicada y, con un extremismo típicamente suyo, su afán revolucionario por cambiar el mundo.
A favor: Idealistas, visionarios, artísticos
En contra: Incomprendidos, extremistas, desapegados
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