Los Escorpio cuando se enojan no pierden nunca la calma sino el habla, y cuando deben protestar utilizan la misma estrategia.
Es muy probable que los demás no perciban la disconformidad de un Escorpio hasta que su aguijón los hiera, por lo cual es un error esperar reacciones inmediatas y transparentes de este signo. Pero no siempre son crueles o manejadores, aunque sea cierto que para ellos el fin justifica los medios; son tan intuitivos que saben cuál es el punto débil del oponente y cómo hacer para vencerlo.
Son los grandes estrategas del zodíaco, por lo cual es positivo confiar en ellos cuando es preciso un consejo. Sin embargo, este signo necesita aprender cuándo detenerse, ya que no se conforma con alcanzar el éxito sino que quiere, además, la destrucción de su enemigo ocasional.
Es muy probable que los demás no perciban la disconformidad de un Escorpio hasta que su aguijón los hiera, por lo cual es un error esperar reacciones inmediatas y transparentes de este signo. Pero no siempre son crueles o manejadores, aunque sea cierto que para ellos el fin justifica los medios; son tan intuitivos que saben cuál es el punto débil del oponente y cómo hacer para vencerlo.
Son los grandes estrategas del zodíaco, por lo cual es positivo confiar en ellos cuando es preciso un consejo. Sin embargo, este signo necesita aprender cuándo detenerse, ya que no se conforma con alcanzar el éxito sino que quiere, además, la destrucción de su enemigo ocasional.