Te recordará la imagen de tu padre o de tu madre. Siempre tendrá un consejo para ti -en tanto y en cuanto se lo pidas-pues no es capaz de meterse donde no lo llaman. Ése que al principio, cuando lo conociste, te daba miedo, resultó ser un tierno amigo. Él también necesitaba de ti, pues no existe un Capricornio que no tenga alguna historia familiar un tanto desgraciada.
Tú captaste que este ser solitario, compartía contigo ciertas tristezas y la misma necesidad de afecto. Él fue capaz de calmar tu agresividad, mostrándote con sencillez y con su experiencia lo que «debe hacerse», en el momento oportuno. Quizás también haya influido en la elección de tu pareja.
Por haber leído tantas historias de vida en las muchas novelas en que incursionó, está capacitado para aconsejarte. Todo andará sobre ruedas siempre, y cuando no tengas que pedirle prestado dinero, pues es sumamente metódico con sus gastos. No por eso se privará, en edad madura, de tener todo el confort hogareño que se merece, casi siempre heredado de su familia.
Tampoco dudará en compartirlo contigo, siempre que seas medido. A Capricornio no le gusta demasiado que se metan en su intimidad. Tampoco le agradará demasiado dedicarte mucho tiempo, ya que ello lo distraería de su meta prefijada: ascender socialmente.
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