Tienen muchas cosas en común. A los dos les encantan los días apacibles para compartir un helado, y si es frente al mar, mejor.
En medio del matrimonio que tanto desearon, con la prole que engendraron, se mirarán para encontrar algún halo de misterio que los enlace nuevamente.
La unión de esta pareja es de una estabilidad pasmosa, con momentos de gran placidez y un final bien reconfortante.
La dulzura de ella y la paciencia de él hacen que la fidelidad selle esta asociación.
Tal vez, tanta lealtad los lleve a una incurable monotonía. Si las cartas natales de alguno de los dos tiene algún elemento de fuego como dominante, aseguraría un colorido diferente para avivar tanta rutina.
En medio del matrimonio que tanto desearon, con la prole que engendraron, se mirarán para encontrar algún halo de misterio que los enlace nuevamente.
La unión de esta pareja es de una estabilidad pasmosa, con momentos de gran placidez y un final bien reconfortante.
La dulzura de ella y la paciencia de él hacen que la fidelidad selle esta asociación.
Tal vez, tanta lealtad los lleve a una incurable monotonía. Si las cartas natales de alguno de los dos tiene algún elemento de fuego como dominante, aseguraría un colorido diferente para avivar tanta rutina.